Que son los vinos de altura
Trabajar la tierra y elaborar vinos Ribera del Duero de altura es todo un desafío para cualquier viticultor. Pero también una fortuna que, en mi caso, tengo la suerte de vivir y disfrutar día a día.
Como te he comentado en otras ocasiones, no soy un “bodeguero de despacho”. Me apasiona el contacto directo con la tierra: caminar entre las cepas, observar la evolución del fruto a lo largo del año y sentir cada estación en la viña.
En este proceso, la altitud del viñedo juega un papel fundamental. No es lo mismo cultivar uva en tierras bajas que en las zonas altas. En los viñedos situados por encima de los 900 metros de altitud, como ocurre en Bodegas Vetusta, el clima extremo, los contrastes térmicos y la composición del suelo marcan la diferencia.
Los vinos de altura se caracterizan por una maduración más lenta y equilibrada de la uva, una mayor frescura, acidez natural y una complejidad aromática que resulta difícil de conseguir en otras condiciones. Sin embargo, trabajar en estos viñedos también implica retos: el clima es más imprevisible, la vendimia debe planificarse con precisión y el manejo de la viña exige una atención constante.
Hoy quiero compartir contigo, desde mi experiencia personal, qué significa realmente elaborar vinos de altura y cómo es el día a día de un viticultor que trabaja en estas condiciones tan singulares y auténticas.
Espero poder transmitirte parte de mi conocimiento y mi pasión por las tierras altas de la Ribera del Duero, donde nacen los vinos de Bodegas Vetusta, y que me inspiran año tras año a seguir elaborando vinos con alma y carácter.
Viñedos de altura en Ribera del Duero. Qué y cómo son
La ubicación de las viñas siempre ha sido, es y será un factor condicionante para el viticultor que las trabaja. Aunque la forma de cultivo sea el misma, a una altura y a otra, ni la tierra ni tampoco el clima es igual en terrenos situados a distinta altitud.
En mi caso, los viñedos de Bodegas Vetusta están situados a diferentes alturas pero, todos ellos, entre 900 y 1020 metros. Lo que queda muy por encima de la media de la Ribera del Duero, que es de unos 800 metros sobre el nivel del mar.
Aunque no existe una norma oficial que establezca a partir de qué altitud se puede hablar de viticultura de altura, en Vetusta lo tenemos claro: cultivamos en tierras altas, con viñedos propios, y elaboramos auténticos vinos Ribera del Duero de altura.
Pero no siempre han sido valoradas, como merecen, estas tierras altas.
Te contaré algo. Hasta los años 60, las viñas se situaban en las laderas de las montañas, en las partes mas pobres que no eran válidas para cereal. Durante un tiempo, se arrancaron casi todas y unos años después, entre los 80 y 90, el boom de las denominaciones de origen, hizo que se volvieran a plantarse. Pero, se optó por situar las plantas en las zonas bajas próximas al río, buscando mayor productividad.
En las últimas décadas, se ha vuelto, otra vez, a plantar en las laderas de las montañas, buscando mayor calidad de uva. Y, esta última, fue la opción escogida por Bodegas Vetusta hace veinte años. Porque, desde el primer minuto, tuvimos claro que, si queríamos producir vinos de alto nivel, teníamos que apostar por cultivar viñedos en las tierras altas de Ribera del Duero.
Hoy podemos decir, sin ninguna duda, que fue la mejor decisión. Año tras año, comprobamos que nuestros viñedos de altura son la clave para elaborar vinos de altura frescos, equilibrados, con personalidad y profundamente ligados al terroir que los vio nacer.
Vinos Ribera del Duero de altura. Por qué son tan valorados
Es un hecho constatado que las uvas procedentes de tierras altas de Ribera del Duero tienen más calidad que las producidas en tierras más bajas. Los vinos Ribera del Duero de altura son mejores porque las tierras altas aportan frescura y acidez a los vinos. Como productor de vinos lo compruebo añada tras añada.
Pero, ¿sabes de dónde procede la famosa calidad de los vinos Ribera del Duero de altura? Te lo explico a continuación.
#1 – Condiciones climatológicas extremas
La Ribera del Duero es conocida por su particular clima de inviernos largos y fríos y veranos muy secos y duros. Y, como es de suponer, cuanto más altos estén situados, más se acentúan esas características climatológicas propias de esta tierra castellana.
En los viñedos de Vetusta que cultivo, las diferencias térmicas, entre el día y la noche y las diferentes estaciones del año, son extremas.
Eso es bueno, porque endurecen el fruto y le ayudan a llegar fuerte hasta la vendimia. Pero, también implica un control riguroso y permanente a pie de viña. Cosa que, por cierto, me gusta. Porque soy de los que piensan que el buen vino se hace ya desde la planta.
Pero, volviendo al tema de la climatología de las zonas altas de la Ribera del Duero, hay épocas del ciclo vegetativo de la viña en que esos contrastes de temperatura cobran especial importancia. Por ejemplo, durante periodo de maduración de la uva previo a la vendimia.
La razón es que en las zonas más altas, la bajada de temperatura al final del verano es más acentuada que en las tierras bajas. Eso permite a mis uvas (cultivadas en una altura de entre 900 y 1020 metros) lograr una maduración más lenta y el punto óptimo de acidez.
Por otra parte, no olvidemos que la continua subida de temperaturas motivada por el cambio climático está cambiando la forma de cultivar. Y, en el caso de las uvas, está obligando a reubicar las viñas en zonas más altas.
Un ejemplo de adaptación de los agricultores al cambio climático es la viticultura de altura que realizamos en Ribera del Duero con tan buenos resultados. Un trabajo, en el caso de Vetusta, humilde, sencillo y respetuoso con la tierra del que me enorgullece formar parte.
#2 – Suelos pobres
Las tierras más altas de Ribera del Duero se caracterizan por tener suelos pobres con menos materia orgánica. Por lo que produce viñas con menos vigor y menos producción.
Puede parecerte que esto es una desventaja respecto a los terrenos de las zonas más bajas, pero… ¡todo lo contrario! Son suelos perfectos para producir uva de gran calidad.
Precisamente, este tipo de terrenos son lo que, desde hace 20 años, hemos buscado y trabajado en Vetusta, para el cultivo de nuestras uvas. Viñedos ecológicos propios ubicados en la Ribera del Duero alta.
Porque, a mayor altitud los suelos son más pobres y pedregosos, por lo que permiten un mayor drenaje para la vid y evita que las plantas crezcan excesivamente vigorosas. Esto se materializa, en menor producción de uva pero de mucha mayor calidad y rica en matices.
#3 – Plantas sanas y fuertes
Como ya te he comentado, las fincas y parcelas de Bodegas Vetusta están situadas, en la parte más alta de la Ribera del Duero.
Esto, es también una ventaja para el cultivo de uvas de calidad. Ya que, gracias a su ubicación en altitud, los vientos de altura hacen que sean zonas mejor ventiladas y mucho más sanas.
Con la ventilación adecuada, la incidencia de las enfermedades fúngicas, como el oidio y el mildiu, es mucho menor. Esto es importantísimo, especialmente, cuando se trata de bodegas, como Vetusta, que realizan cultivo ecológico de la tierra sin ningún tipo de uso de pesticidas ni fitosanitarios.
Además, las plantas cultivadas en tierras altas reciben una radiación solar superior a la que llega a las situadas en zonas bajas. Esto, favorece la capacidad fotosintética del viñedo y beneficia tanto a la planta como al fruto.
Como has podido ver a lo largo de este artículo, elaborar vinos Ribera del Duero de altura es un proceso que lleva tiempo, mucha dedicación e implica un amplio conocimiento del terruño.